Lo sucedido en las elecciones complementarias de Chubut del domingo último no es un dato más. El kirchnerismo demostró que tiene grietas y que es posible otro camino para el peronismo.
El irremediable signo del destino colocó a Mario Das Neves otra vez al frente de la única alternativa potable dentro del peronismo. Alternativa que será acompañada por miles de compañeros en todo el país que ya expresaron su disconformidad con el gobierno nacional y que además no se sienten representados por el duhaldismo- PRO. La realidad es que Das Neves encabeza la Tercera Posición como ya venía pregonando Peronismo Para Todos.
En varios distritos hay dirigentes con la misma convicción, por ejemplo Jorge Busti en Entre Ríos, Jorge Obeid en Santa Fe, José Manuel De la Sota en Córdoba, Felipe Solá en la provincia de Buenos Aires y muchos otros dirigentes en el resto del país que cuando vean una opción van a despegarse del kirchnerismo porque comprenden que está agotado.
El kirchnerismo en la actualidad depende de la bipolaridad de Cristina, de la verborragia de Aníbal Fernández, del compromiso de los cómplices y lo más dramático e increíble: que si los número de las encuestas no le resultan favorables para que Cristina obtenga un triunfo en primera vuelta y obtener mayoría en ambas cámaras para poder impulsar la locura de una rereelección para el 2015; las dos opciones serían Alicia Kirchner y Daniel Scioli. Imaginemos un escenario político con ambos candidatos más el apoyo de Hugo Moyano. Esto ya no va más y muchos peronistas lo sabemos.
La alternativa de un nuevo espacio peronista está latente y Das Neves hace tiempo viene realizando esa lectura política correcta. Llegó la hora de ponerla en marcha. Parafraseando a Aníbal y sus zonceras, no hay lugar para tibios y débiles. Se acabó el tiempo de los compañeros convertidos en cómplices y los adversarios convertidos en enemigos. Esa lógica kirchnerista ya agotó al sistema político y a la gente. Hagamos futuro.
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